Miguel Vargas Maldonado prometió a los miembros de la Comisión Política del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) que personalmente les gestionará posiciones en el Congreso Nacional, las alcaldías y en un eventual gobierno de unidad nacional con el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), aunque de los cargos en esta última instancia advirtió de que dependerá del porcentaje electoral que aporte su organización en las próximas elecciones.

 Vargas arengó a los dirigentes más importantes de su partido, miembros de la Comisión Política, en una reunión en la casa nacional perredeísta.

En su intervención, Vargas les aseguró a los dirigentes que la participación del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) en el gobierno dependerá del porcentaje electoral que aporten a la alianza con el PLD en las próximas elecciones.

También reveló que el acuerdo, en sentido general, está completo, pero reconoció que hay “algunos casos puntuales” que se decidirán a partir del martes próximo, con la consulta de las preferencias electorales en las demarcaciones que aún no tienen el aval del PLD.

Dijo que se pondrá al frente de la campaña política de cada uno de los candidatos que presente el PRD en el acuerdo con los peledeístas, visitando cada comunidad e impulsando sus nominaciones para garantizar un fortalecimiento de la organización blanca.

Vargas Maldonado dijo que su interés era encabezar ese acuerdo de unidad nacional, pero indicó que las circunstancias se lo impidieron. 

El detalle de cuántas posiciones, y cuáles demarcaciones tendría el PRD, no fue revelado por su presidente, que invitó en varias ocasiones a su militancia a acudir temprano al hotel Jaragua, donde mañana, lunes, se firmará el acuerdo con el presidente Danilo Medina.

La invitación de Vargas a sus compañeros de partido es que asistan a las 4:00 de la tarde, una hora antes de firmar los acuerdos con el PLD. 

Miguel Vargas comenzó su discurso explicándole a su militancia que desde 2004 se propuso aspirar a la presidencia de la República, levantando al PRD de su mal comportamiento en los comicios de ese año, donde perdieron la presidencia del país en un intento de reelección presidencial.